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Patología orbitaria
La Clínica Moreiras es referencia mundial en el tratamiento de patología orbitaria desde hace más de 30 años al haber tratado a más de 6.000 pacientes entre tumores y orbitopatía distiroidea.
Durante este tiempo, más de 300 oftalmólogos de todo el mundo han venido a la clínica para formarse y conocer la creación de nuevas técnicas y vías de abordaje. Nuestros estudios e investigaciones han sido publicadas en revistas y libros en español e inglés que son referencia mundial.
Patologías
En la órbita, que es la cuenca del ojo, se incluyen la grasa, los músculos, el globo ocular, vasos y nervios sensitivos y motores además del nervio óptico. En estos tejidos pueden aparecer todas las patologías que existen en el organismo, desde una infección que se origina en una muela hasta cualquier metástasis de cualquier tumor que aparezca en el ser humano.
Las principales patologías de la órbita pueden ser inflamaciones, quistes y tumores. Los tumores pueden ser benignos (tardan semanas y meses en crecer) o malignos que crecen en pocas semanas como linfomas, carcinomas, sarcomas y metástasis de cualquier origen.
Es muy importante cuando aparece una lesión o tumor en la órbita que el paciente sea explorado por un especialista en órbita que tenga formación de la patología en:
- Áreas vecinas de otorrinolaringología que le permita conocer senos y fosa nasal.
- Área de neurocirugía para saber que sucede con los tumores cerebrales que se extienden a la órbita a través del techo orbitario y al revés.
- Cirugía maxilofacial para poder trabajar y manipular los huesos orbitarios.
- Conocimientos de diagnóstico por imagen para saber interpretar pruebas como ecografía, escáner o tomografía computarizada y resonancia magnética de la órbita.
Tratamiento
Desde hace más de 30 años, en la Clínica Moreiras hemos diseñado nuevas vías de abordaje quirúrgico para hacer más sencilla su extracción sin necesidad de hacer osteotomías cortando los huesos de la pared lateral. Hacemos microcirugía por incisiones pequeñas de 12 mm a través del pliegue del parpado superior o en el canto externo de la conjuntiva. Con estas incisiones apenas quedan cicatrices visibles a las pocas semanas.
Estas técnicas novedosas reducen el tiempo de cirugía y la recuperación del paciente es inmediata. Puede trasladarse a su domicilio en unas horas sin necesidad de ingreso hospitalario.